Santiago/CHILE.- Feligreses de las diversas parroquias y hasta miembros de la JOC de La Victoria, que él formara, repletaron este domingo 8 la parroquia San Alberto de Sicilia, en Recoleta, para despedir los restos del padre Osvaldo Martínez, fallecido el pasado viernes 6, a los 81 años de edad, quien se desempeñó en diversas parroquias de Santiago, especialmente de los sectores más populares de la Zona Sur.
La misa estuvo presidida por monseñor Cristián Contreras Villarroel, obispo auxiliar de Santiago, y concelebrada por los vicarios Rafael Hernández, de la Zona Norte; Miguel Hoban, Zona Sur, y Galo Fernández, Zona Oeste, además de casi 30 presbíteros. Comunidades de todas las parroquias donde ejerció su ministerio, amigos y movimientos como la JOC, expresaron su cariño y emoción ante la partida del sacerdote. La misa estuvo acompañada por cantos religiosos que interpretó el grupo folclórico que el padre Osvaldo creó en la parroquia María Mediadora, de la comuna de Pedro Aguirre Cerda, donde se desempeñaba últimamente.
Durante la homilía, monseñor Contreras destacó al vocación sacerdotal del padre Osvaldo, especialmente su servicio a los más pobres. Igualmente recordaron su testimonio sacerdotes como el padre Sergio Nasser y Renato Giavio, quienes le conocieron muy de cerca en la Zona Sur.
El fallecido sacerdote también fue párroco en San Diego de Alcalá, Nuestra Señora de la Victoria, San José Obrero y Nuestra Señora del Carmen de Quilicura, entre otras.
Su barrio de siempre
Pero su parroquia de siempre fue San Alberto de Sicilia, en cuyo barrio nació y murió y donde recibió sus primeros y últimos sacramentos, acompañado este tiempo de su única hermana sobreviviente, Eliana, quien señala que “me ha dolido mucho su muerte. Vivía conmigo y lo atendí hasta el último momento. Él se iba los jueves a la parroquia María Mediadora y regresaba a casa el domingo, hasta que ya no pudo trabajar y se quedó en casa”.
El padre Cristián Castro, párroco de San Alberto, también recuerda con cariño al padre Osvaldo, quien ya era mayor cuando él entró al seminario. Destacó “su gran alegría y espíritu de servicio, con un sentido del humor muy fino, muy acogedor y muy cercano la gente. Le gustaba mucho escalar cerros”, recuerda.
Los funerales el padre Osvaldo Martínez se realizaron en el Cementerio General.
