El presidente de la Conferencia Nacional de los Obispos del Brasil (CNBB), cardenal Raymundo Damasceno Assis, afirmó que la presidenta Dilma Rousseff garantizó la seguridad para la realización de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) y la visita del papa Francisco al Brasil, a fines de julio, en Río de Janeiro.
“Es una misión del Estado, del municipio, del propio gobierno provincial ofrecer garantías a todos los ciudadanos que vienen al Brasil. Y está claro que ella nos va a ofrecer esa garantía porque se trata de un acontecimiento muy grande. Hablamos de 2 millones de personas. Y además tenemos la presencia del Santo Padre”, dijo el purpurado tras reunirse con la presidenta brasileña.
No se piensa alterar la fecha o la programación de la JMJ. Según el cardenal, “una u otra manifestación” que pueda ocurrir paralelamente al magno encuentro católico será normal, como ya sucedió en otros países que acogieron la jornada.
“No estoy preocupado. Todo está desarrollándose normalmente, no vamos a hacer ninguna modificación, ni en la programación ni en la fecha. Los gobiernos tienen la misión de guardar la seguridad de aquellos que van a participar en la jornada. Estamos seguros de que los jóvenes que vendrán serán muy bien recibidos”, dijo el presidente de la CNBB.
En relación a las manifestaciones que están ocurriendo en el país, el cardenal Assis afirmó que Dilma está “atenta” y “buscando entender” las peticiones de los que están saliendo a la calle.
“Ella está atenta a los que está sucediendo, pero siempre buscando entender lo que esas manifestaciones quieren decirle al gobierno, a la sociedad, y a partir de ahí dar enfoques diferentes a las políticas públicas”, afirmó el cardenal.+
