Salamanca/ESPAÑA.- Ayer jueves 1 de marzo de 2012, con motivo de la pasada festividad de Santo Tomás de Aquino, organizado por la Facultad de Teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, el Arzobispo Castrense, monseñor Juan del Río, ha impartido una conferencia magistral en la magnífica Aula Magna de la Universidad.
Previa a la misma, a las once y media, ha presidido una eucaristía en la Capilla universitaria, a la que han asistido todos los profesores y alumnos de la Facultad de Teología. En la Homilía el Arzobispo Castrenseha recordado una carta que escribió Santo Tomás de Aquino a un discípulo suyo que se llamaba Teófilo. En ella se interroga cómo conseguir la Sabiduría del Corazón.
Posteriormente ha impartido la conferencia que se titulaba: “Un Doctor para la Nueva Evangelización: San Juan de Ávila”. En ella, Monseñor del Río quiso responder a la pregunta de por qué hoy era atrayente, como evangelizador, un personaje del siglo XVI.
En primer lugar, comparando los tiempos de ahora con los de antes, se puede ver, como ambos son recios y turbulentos. En respuesta a esto, San Juan de Ávila es un preclaro exponente de síntesis y armonía entre la pastoral inmediata y la necesidad de la constante reflexión teológica. En la que encontramos cómo su acción pastoral no es producto de las improvisaciones del momento, ni de la superficialidad, sino que es fruto de la vivencia de su ministerio sacerdotal centrado en Cristo, en la Iglesia y en los pobres, constantemente alimentado en la oración y en el estudio.
