Ante la declaración del 1 de junio como Día Internacional de los Padres

Para Leonor Tamayo, de Profesionales por la Ética, «es, sin duda, motivo de satisfacción que sea reconocido el papel de los padres como tales y que la comunidad internacional designe un día de reconocimiento a nivel mundial y que se inste a que sean los jóvenes y niños los que se involucren de manera especial en esta celebración de manera que sean conscientes de la labor que realizan los padres, de su dignidad y su valor.  Los padres, con su esfuerzo, dedicación y cariño, dan soporte a la célula básica de la sociedad que es la familia y educan a las generaciones siguientes, por eso, su labor y su entrega generosa y desinteresada merece el total apoyo de la sociedad, un apoyo que en demasiadas ocasiones les es negado ya que se infravalora la familia, la maternidad y paternidad y no se les da el valor social que tienen llevando muchas veces a situaciones discriminatorias -tanto en la sociedad como en el mundo laboral-  para las madres o padres por el hecho de serlo».

No obstante, para Tamayo, «este tipo de declaraciones  universales se quedan en papel mojado si en los países no hay políticas ticas reales de apoyo a la paternidad y maternidad que permita a los jóvenes formar una familia y tener el número de hijos que libremente decidan tener y no el que las condiciones laborales les impongan, que promocionen la verdadera conciliación de la vida familiar y laboral y garanticen la libertad de elección de la mujer en lo que respecta a su dedicación la familia. En tiempos de crisis económica, el apoyo social, jurídico y político a la maternidad y a la paternidad garantiza el futuro de toda la sociedad porque sin recambio generacional no hay futuro para nadie».

En este sentido, Tamayo recuerda que el Partido Popular había prometido en su programa electoral una ley de protección de la maternidad de la que no ha vuelto a hablar. «Ni está ni se le espera». En este sentido, Tamayo anuncia que va a dirigirse al Gobierno para proponerle una agenda de actos y una batería de medidas para celebrar el Día Internacional de los Padres el próximo 1 de Junio.

«El reconocimiento internacional de la paternidad y la maternidad es un paso más en el auténtico reconocimiento de la dignidad humana y los derechos fundamentales en un momento en que el hecho de ser padre o madre es considerado una lacra para buena parte de la sociedad, las empresas e incluso los gobiernos y administraciones, al contrario de lo que le corresponde y de lo que establece la Declaración Universal de Derechos Humanos», concluye Tamayo.