La otra crisis: Vómito popular

CAMINEO.INFO.-Ya ha empezado la cuenta atrás de la era Zapatero y por eso mismo es un buen momento para echar una mirada atrás y alabar a nuestro presidente en funciones. Sí, para felicitarle por su coherencia, por su unidad de vida, por creer ciegamente en su proyecto social y hacer todo lo posible por sacarlo adelante, sin importarle el qué dirán ni el coste electoral de unas decisiones que han atentado contra el sentido común y la ley natural; que para Zapatero no existen, claro está.
Hay que felicitar a Zapatero porque es una persona que cree en su proyecto y fue capaz, para sacarlo adelante, de rechazar en el año 2009 un pacto de Estado con el Partido Popular. Afirmó ZP que era posible ponerse de acuerdo con los populares en algunos asuntos, pero no en aquellos que entraban a formar parte del ideario ideológico socialista. Y que ahí, en el meollo ideológico, estaba el sentido último de esa alternancia política que los ciudadanos eligen cada vez que acuden a las urnas.
Hay que felicitar a Zapatero, pero también hemos de reconocer que se equivocó de todas, todas. Sí, porque entre populares y socialistas ya no existen diferencias ideológicas. Son lo mismo con matices diferentes. Y así de claro lo ha dejado la portavoz de los populares, la señora Sáenz de Santamaría, cuando le preguntaron sobre la derogación de la actual ley del aborto. La popular contestó que no es posible que una menor vaya a abortar sin la compañía de sus padres, que ese punto lo van a retirar de la ley, dando a entender que en todo lo demás va a seguir igual, que el derecho al aborto va a continuar vigente, que ellos tampoco van a terminar con la matanza de cientos de miles de bebés.
Hay que felicitar a ZP y avergonzarse de la postura tibia y vomitiva de unos populares que han perdido el norte, que ideológicamente no se diferencian en casi nada de los socialistas, que son piedra de escándalo para la gente sencilla que sigue creyendo en la existencia de la verdad, del bien objetivo y de la vergüenza torera.
Empezó la cuenta atrás para que dé comienzo un nuevo periodo político, para que la crisis económica siga siendo el único aspecto a tratar por los populares, que no por los socialistas, pues estos saben muy bien dónde quieren llegar y qué ideología quieren imponer a la sociedad entera. Así nos va, y con Rajoy… ¡igual de lo mismo!