Portada
Vaticano
Realidades Eclesiales
Iglesia en Espańa
Iglesia en América
Iglesia resto del mundo
Cultura
Sociedad

·Homilia Dominical
·Hablan los Obispos
·Fe y Razón
·Reflexion en libertad
·Colaboraciones



 
 

 

 

 

 
Apr 2024
MoTuWeThFrSaSu
1 2 3 4 5 6 7
8 9 10 11 12 13 14
15 16 17 18 19 20 21
22 23 24 25 26 27 28
29 30          

   


www
Portada:: Homilia:: Ciclo A:: Domingo II T.O: "Tú eres mi siervo, de quien estoy orgulloso."

5 / 5 (4 Votos)




Domingo II T.O: "Tú eres mi siervo, de quien estoy orgulloso."

Sat, 18 Jan 2014 23:50:00
 

CAMINEO.INFO.-

Isaías 49, 3. 5-6
Salmo 39, 2 y 4ab. 7-8a. 8b-9. 10
Corintios 1,1-3
Juan 1, 29-34


Empezamos un nuevo tiempo litúrgico. El tiempo ordinario, en el cual vamos contemplando la vida de Jesús, su predicación, sus milagros. La finalidad de este tiempo litúrgico, es conocer más a Jesús, enamorarnos más de su persona, de sus criterios, de sus maneras de hacer, de sus actitudes.

El Papa Francisco en la extraordinaria exhortación Evangelii Gaudium nos dice: “Invito cada cristiano,..., a renovar ahora mismo su encuentro personal con Jesucristo.... (ésta es la pretensión del tiempo ordinario renovar nuestro encuentro con Cristo). Al que arriesga, el Señor no lo defrauda, y cuando alguien da un pequeño paso hacia Jesús, descubre que Él ya esperaba su llegada con los brazos abiertos. Éste es el momento para decirle a Jesucristo: «Señor, me he dejado engañar, de mil maneras escapé de tu amor, pero aquí estoy otra vez para renovar mi alianza contigo. Te necesito. Rescátame de nuevo, Señor, acéptame una vez más entre tus brazos redentores». ¡Nos hace tanto bien volver a Él cuando nos hemos perdido!”

Con este deseo de renovar nuestro encuentro personal con Jesucristo, empezamos el tiempo ordinario.

Estamos en el comienzo del evangelio de Juan, y en él sale la profesión de fe de Juan Bautista que da sentido a todo el evangelio: “Y yo... he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios”. Esta confesión es como un encabezamiento, el tema central, de toda la obra de Juan.

Nos ayuda a profundizar su identidad las dos acciones que atribuye a Jesús: “quita el pecado del mundo”, “es el que ha de bautizar con Espíritu Santo”. Jesús nos libera del pecado y nos comunica el Espíritu Santo. Síntesis perfecta del cristianismo.

Tradicionalmente, en occidente hemos puesto más el acento en la primera dimensión: Jesús liberador de la esclavitud del pecado. Y, oriente ha puesto más el acento en la segunda dimensión: Jesús comunicador del Espíritu Santo. Las dos se complementan y enriquecen nuestra vivencia.

Resumiendo: empezamos un nuevo tiempo litúrgico, se nos invita a un nuevo encuentro con Jesús que nos libera de todo aquello que no nos deja ser felices y que nos comunica su principio vital, nos comunica la Vida.

Y esto, que lo hemos escuchado tantas veces, ¡es tan importante!, ¡tan determinante!, que nos pide a nosotros mucha humildad, mucha atención a lo que nos dice, mucho deseo de cambiar aquello que no encaja con los valores de Jesús, se nos pide estar dispuestos a desinstalarnos, a hacer caminos nuevos, a hacer cambios en nuestras vidas, porque quien nos habla es Dios mismo, y con Él no podemos hacer juegos de manos, no podemos engañarlo, ¡no podemos hacer una escucha pasiva de lo que dice.!

Un ejemplo que quizás pueda ayudar a entender lo que quiero decir: hace unos días una persona me vino a decir: “antes, en mi movimiento, nos hablaban mucho del Papa, Papa por aquí, Papa por allá, sus homilías, sus escritos, sus viajes, sus anécdotas, y ahora con este Papa, nada de todo esto, de tanto en tanto, para que no se note demasiado, dicen alguna cosa. Siempre nos habían animado a leer el magisterio del Papa, y de este último documento, no nos hablan.”

¿Qué está pasando aquí? El problema de fondo es si seguimos una ideología (la ideología cristiana) o seguimos a Jesús (cristianismo). Mientras me dicen cosas que encajan con mi planteamiento, con mi montaje (= ideología) todo muy bien. Cuando sale alguien, ni que sea el Papa, que dice alguna cosa que no encaja con el montaje ideológico, lo ignoro. Esto, hermanos y hermanas, es seguir una ideología y no a Jesús.

Y atención, y por esto pongo el ejemplo: ¡esto es un peligro para todos! ¡Y un peligro constante! Empezamos con el tiempo ordinario a escuchar la predicación de Jesús, pero ¿seremos dóciles a lo que Jesús nos dirá? ¿estaremos dispuestos a cambiar cosas en nuestra vida? ¿comportamientos, maneras de hacer, gastos, opciones personales?

Si decimos no, no seguimos a Jesús, seguimos la ideología cristiana, y todo lo que no encaja con mi planteamiento, lo ignoro.

Es más, aquello que más nos interpela, que más nos choca, que más nos cuesta de aceptar o de entender, es lo que con más atención tendríamos que escuchar y rezar.

Miremos nuestro corazón: ¿hay deseo de cambio? ¿de avanzar? ¿de conversión? ¿atracción por Jesús? ¿deseo de escucha? ¿qué hay en nuestro corazón?

Acabo con la oración que el Papa nos animaba a hacer a Jesús: «Señor, me he dejado engañar, de mil maneras escapé de tu amor, pero aquí estoy otra vez para renovar mi alianza contigo. Te necesito. Rescátame de nuevo”.







Nombre:
Email:
Titulo:
Comentario:




SI QUIERES COLABORAR CON CAMINEO.INFO PULSA DONAR

Preview Chanel Preview Chanel
Camineo.info 2004-2015

PHPCow news publishing script, content management system Review www.camineo.info on alexa.com