Portada
Vaticano
Realidades Eclesiales
Iglesia en España
Iglesia en América
Iglesia resto del mundo
Cultura
Sociedad

·Homilia Dominical
·Hablan los Obispos
·Fe y Razón
·Reflexion en libertad
·Colaboraciones



 
 

 

 

 

 
Apr 2024
MoTuWeThFrSaSu
1 2 3 4 5 6 7
8 9 10 11 12 13 14
15 16 17 18 19 20 21
22 23 24 25 26 27 28
29 30          

   


www
Portada:: Homilia:: Ciclo B:: Solemnidad de Navidad





Solemnidad de Navidad

Wed, 24 Dec 2014 19:03:00
 

Para vivir la Navidad necesitamos, antes que nada, un corazón que tenga capacidad de sorpresa, capacidad de admiración, capacidad de asombro, de quedarnos boquiabiertos otra vez ante lo que celebramos.

Dice Góngora; “Hay distancia más inmensa de Dios a hombre, que de hombre a muerte”. ¡Qué poético! Que un hombre muera en una cruz entra dentro una cierta previsibilidad, pero que Dios se haga hombre, esto es algo impensable.

Lo que celebramos hoy es sorprendente, inimaginable: Dios se ha hecho un niño. ¡Es un escándalo! Por la razón, por ella toda sola es imposible de aceptar. Sólo una razón iluminada por la fe puede hacer este paso. Un paso no siempre fácil.

Lo invisible, se ha hecho visible. El Todopoderoso se ha hecho vulnerable. Lo eterno, se ha hecho finito. Lo inmortal se ha hecho mortal. Lo inasequible, se ha hecho accesible. Creer, de verdad, ¡¡todo esto es una osadía!! Nunca, nunca, no contemplaremos bastante y pensaremos suficiente en este gran misterio.
Después del asombro inicial, a medida que vamos rezando y contemplando este misterio, vamos descubriendo el amor de Dios. Sólo el amor es capaz de hacer un gesto parecido.

Nos hace falta, con mucha urgencia, descubrir el amor de Dios. Descubrirlo para poder quedar llenos de este amor de Dios. Si pasamos rápidamente ante este acontecimiento no descubriremos nada, todo queda en una cosa epidérmica y superficial. Nos es preciso dar tiempo a nuestro corazón para que pueda sentir este amor. El cochinillo al horno no se hace en cinco minutos. También nuestro corazón necesita un tiempo para sentir este amor.

Darnos cuenta del amor para quedar inundados por este amor, para poder recibir y acoger este don. Este amor es un bálsamo vivificante que cura nuestras heridas y nos da nuevas fuerzas, nos da un nuevo impulso para amar.

Encontrarnos con el Amor, encontrarnos con Jesús, hoy y aquí, y los próximos días. Como nos propone el Papa en Evangelii Gaudium: “Invito a cada cristiano, en cualquier lugar y situación en que se encuentre, a renovar ahora mismo su encuentro personal con Jesucristo” (nº 3). “Jesucristo te ama, dio su vida para salvarte, y ahora está vivo a tu lado cada día, para iluminarte, para fortalecerte, para liberarte”. (nº 164).

Encuentro con Jesús que vivimos en el silencio, en la oración, en la lectura atenta de los evangelios, y también en la Iglesia, en la comunidad, en la liturgia, en los sacramentos. ¡No nos escandalicemos de la Iglesia! ¡Que nuestra fe no pierda su dimensión eclesial!

La fe no se puede transmitir telepáticamente, sino humanamente, esto es la Iglesia. Como todo acontecimiento humano. Todo movimiento político o sindical o asociativo necesitará de una estructura. Sin la estructura no estaríamos ahora aquí, no sabríamos nada de Jesús.

Además si lo pensamos bien, la Iglesia está en continuidad con la encarnación. Este Dios que entra en la historia, no entra para marchar al cabo de treinta y tres años, si no que entra para quedarse y continuar comunicando salvación. En la Iglesia hay una presencia especial de Cristo. En los sacramentos hay una acción especial de Cristo. No nos escandalicemos de la Iglesia. A pesar todas sus limitaciones, ella es Dios con nosotros.

Y de todo esto nace la alegría:

. sorprendidos de un Dios que se hace hombre, nos alegramos
. descubriendo que lo ha hecho por amor a nosotros, nos alegramos
. descubriendo cuánto amor hay en este gesto, nos alegramos
. quedando inundados de este amor al contemplarlo, nos alegramos
. sabiendo que este amor que nos inunda lo puede hacer todo nuevo; puede generar el perdón, puede provocar el acercamiento, llega a ser fuente de paciencia, nos hace más cercanos, más humanos, más fraternos, nos capacita para amar verdaderamente, nos alegramos.

Esta es la alegría de la Navidad. Navidad es tiempo para descubrir todo esto. Navidad es tiempo de reencontrarnos con Jesús de una manera nueva. Navidad es tiempo para acoger la luz que sale de la cueva de Belén. Él está en la puerta y llama, abrámosle nosotros la puerta.







Nombre:
Email:
Titulo:
Comentario:




SI QUIERES COLABORAR CON CAMINEO.INFO PULSA DONAR

Preview Chanel Preview Chanel
Camineo.info 2004-2015

PHPCow news publishing script, content management system Review www.camineo.info on alexa.com