El Presidente del Consejo de Conferencias Episcopales de Europa (CCEE), Cardenal Péter Erdo, explicó que la esencia de la Europa tal y como es hoy día, debe sus mejores rasgos al impulso de la historia del Cristianismo.
El Cardenal Erdo, Arzobispo de Esztergom y Budapest (Hungría), se encuentra en Roma para celebrar 12º Congreso Europeo por la Catequesis y la sesión de la presidencia del CCEE.
En una entrevista concedida el 9 de mayo a ACI Prensa, el Cardenal Erdo explicó que la Europa de hoy vive una hermosísima experiencia porque "todas las culturas nacionales, se han desarrollado detrás de impulsos recibidos por el Cristianismo".
En Europa, "la fe, ha demostrado gran cantidad de formas y expresiones culturales que formulan la misma convicción cristiana", subrayó.
Según el Cardenal, Europa necesita beber nuevamente del catecismo para dar oxígeno al viejo continente. "Ante todo, Jesús nos confió la misión de anunciar la buena noticia hasta el final de los tiempos, hasta el final de esta Tierra, y por tanto debemos buscar siempre el diálogo con la cultura y con la sociedad. Este es el primer paso del método misionero, y después debemos transmitir en cambio, todo el contenido de nuestra fe", exhortó.
En el continente europeo, "siempre hay una tensión histórico cultural, ya que por una parte, debemos adoptar los elementos de la cultura de los pueblos individualmente, y por la otra, tenemos que expresar en todos estos elementos la riqueza de la fe".
"Hay veces que no es fácil, hay veces que no es posible, por eso, la fe tiene también esa cuestión de desarrollar las culturas", dijo.
Además, el Cardenal Erdo ofició una Solemne Misa en la Basílica de Santa María la Mayor de Roma para celebrar el Día de Europa, y recordó que los santos patronos del continente son la columna del templo de Dios.
El Purpurado señaló que la unidad "es absolutamente necesaria entre los discípulos de Dios. Y esta unidad va unida a los lazos de la fe común y de la comunión jerárquica", "el Romano Pontífice, como sucesor de Pedro, es el perpetuo y visible principio y fundamento de la unidad, ya sea de los obispos, que de la multitud de fieles", agregó.
Expresó que "el principio vital de todos los discípulos y de toda la Iglesia es la unidad con Cristo", y al hablar de la Nueva Evangelización, subrayó que "necesitamos del testimonio de los apóstoles, de los discípulos y de la Iglesia de cada generación".
"Los santos patronos - San Cirilo y Metodio, o Santa Brígida de Suecia y Santa Catalina de Siena-, refuerzan la identidad de la comunidad cristiana. Y cada parroquia, cada diócesis, puede tener un santo patrón. Los pueblos tienen sus propios ángeles, los cristianos reciben en el bautismo el nombre de un santo, nombre que después expresa su identidad personal", y "precisamente es así como Europa, esta gran comunidad de pueblos, tiene sus santos patrones, los tiene como tiene en efecto su propia identidad, y así se reconcilie consigo misma, sin rechazar ni ignorar su propio pasado, ni la plenitud de su presente".
"Por este nuevo testimonio y por nuestra renovación espiritual, tan necesarios, pidamos la intercesión de la Virgen María, Madre de la Iglesia de todos los santos patrones de Europa", concluyó
