Del 12 al 14 de octubre se realizó en Guadalajara, México, la reunión internacional de líderes juveniles pro-vida “Dilo Bien 2012”, organizada por la Alianza Internacional de la Juventud, con la finalidad de construir una agenda nacional por la vida sumando los esfuerzos de todas las organizaciones juveniles que trabajan por la vida en México.
Los objetivos de la reunión, a la que asistieron unos 300 jóvenes líderes de grupos pro vida de todo México, fueron son: analizar el panorama actual de acciones contra la vida; conocer la estrategia, cifras, instituciones y actores contra la vida; hacer un recuento de los recursos y las acciones de las organizaciones por la vida en México; definir un plan de acción anual por la vida en México; generar una red activa de organizaciones juveniles por la vida en el país; y proponer el blindaje a la vida a los funcionarios electos 2012.
Abrió las sesiones, el día 12 de octubre, el sacerdote argentino monseñor doctor Juan Claudio Sanahuja, quien expuso sobre “La cultura de la vida y sus amenazas”. Entre los numerosos oradores intervino el obispo de Tehuacán y presidente de la Comisión Episcopal por la Vida, del episcopado mexicano, monseñor Rodrigo Aguilar, quien expuso sobre “La dignidad del ser humano”.
Los congresos “Dilo Bien”, organizados por la Alianza Internacional de la Juventud, surgieron en León, Guanajuato, en agosto de 2010, en el marco de la Conferencia Mundial de la Juventud, para hacer oír la voz de los jóvenes que defendían los auténticos Derechos Humanos.
El congreso de Guadalajara resolvió, entre otras cosas, enviar dos cartas, una a los líderes mundiales y otra al Papa. A continuación el texto de la carta a los líderes mundiales.
Rechazamos la imposición de la cultura de la muerte
Carta abierta a Ban Ki Monn, Kofi Annan, Henry Kissinger, David Rockefeller, Maurice Strong, Mijail Gorbachov, Leonardo Boff, y otros, y a sus testaferros Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero, Francois Holland, Michelle Bachelet, Dilma Rousseff, Barack Obama, Hillary Clinton, Manuel Camacho, Marcelo Ebrard, y otros:
“El Don de la Vida que Dios puso en la naturaleza del ser humano, no puede ser corrompido ni destruido, como pretende el manifiesto llamado “Informe Kissinger” de 1974, que lanzó el programa desarrollado a nivel global, manipulando en forma ilegítima a la Organización de las Naciones Unidas, por medio de las llamadas Conferencias o Reuniones, Mundiales o Internacionales que han conducido a la Cultura de la Muerte, que inició sus operaciones con la consigna ¡sexo sin concepción!, para terminar con ¡concepción sin sexo!
“Esto es un atentado contra la naturaleza humana y la ley de Dios, la dignidad de las personas y las familias. Dicho ‘plan’, corrompe las fuentes de la vida y mata antes del nacimiento (aborto) y mata antes de la muerte natural (eutanasia).
“Hace dos años en la ciudad mexicana de León, Guanajuato, nos opusimos con toda energía a la manipulación de los jóvenes, cuando rechazamos la consigna de sus empleados burócratas de la ONU, en el Congreso Mundial de la Juventud, con sus ‘conclusiones’ prefabricadas para sumarlas a los criminales proyectos de las Conferencias de Río de Janeiro sobre Medio Ambiente y Desarrollo en 1992; El Cairo sobre Población y Desarrollo en 1994; y Pekín sobre La Mujer en 1995, con sus secuencias históricas conocidas.
“Hoy los acusamos ante las naciones y ante la historia, de ser los gestores de un perverso plan que dio ilegítimas y enormes ganancias económicas a la industria químico farmacéutica y a ustedes la ‘satisfacción’ de querer ‘ser como dioses’ controlando las fuentes de la vida, destruyéndola a su gusto, emulando así ‘al diablo que es homicida desde el principio’. Tomamos nota también de que ustedes presumen de ser ateos y se ponen de acuerdo con los panteístas para sus malvados propósitos.
“Entendemos perfectamente que detrás de su pervertido plan están la soberbia y la mentira y que Dios los juzgará, cuando al fin de sus vidas -en varios casos muy próximas- se presenten ante el Creador del don de la vida y no tengan palabras para responder.
“Por nuestra parte, seguiremos dando en forma permanente el testimonio que nos corresponde como jóvenes que aceptamos que “proteger la vida está en nuestras manos”.+
