Mons. Stanovnik a los empedradeños: No pueden desconocer ni negar su clara matriz cristiana

El arzobispo de Corrientes, monseñor Andrés Stanovnik OFMCap, destacó que la fundación de Empedrado coincida “providencialmente con la festividad de Nuestro Señor Hallado” y recordó que “esta bella imagen del Crucificado comparte la primacía fundacional de este pueblo con la advocación de Nuestra Señora de la Candelaria de Ohóma, bajo cuya protección fueron colocados los primeros asentamientos poblacionales que colonizaron esta región”.

“Hacia fines del siglo XVIII y principios del siglo XIX, existía una forma de ranchería alrededor de la capilla, que los vecinos consagraron al Señor Hallado. A partir de esa raíz cristiana y católica se fue desarrollando el pueblo de Empedrado”, señaló.

El prelado valoró también la “clara matriz cristiana de este pueblo, que ningún empedradeño podría desconocerla y menos aún negarla” y consideró que “hoy le toca a esta generación redescubrir el maravilloso don que significa pertenecer a este pueblo. Pero, al mismo tiempo que evocamos agradecidos ese don, debemos comprometernos en la tarea de hacerlo fecundo por el camino del progreso espiritual y material de sus habitantes”.

Tras asegurar que “nada mejor que dirigir nuestra mirada creyente hacia los orígenes”, sostuvo que “de poco y nada nos serviría una evocación histórica de nuestros orígenes, si no descubriéramos en esa conmemoración la presencia viva y real de Dios en medio nuestro”.

Monseñor Stanovnik recalcó que el mensaje que Jesucristo “comunica es claro: el amor es el motor de la historia y no el odio. La paz y no la guerra hacen progresar a las familias y a los pueblos. El amor de Dios que se derrama en el corazón del creyente es más fuerte que el odio y que la muerte”, por esto “el amor del Señor Hallado es el que funda sobre bases sólidas el vínculo amoroso entre un hombre y una mujer; sobre ese amor, dirigido hacia el prójimo, se puede construir una convivencia social y política, en la que todas las acciones se orienten realmente hacia el bien de la gente y privilegien la atención y el cuidado de las personas y familias más pobres y vulnerables”.

“Si extraviáramos de la memoria la imagen del Señor Hallado, correríamos el riesgo de perder no sólo el mensaje más profundo e inclusivo que en ella se representa, sino que quedaríamos huérfanos del amor de Dios. La orfandad más desoladora para el ser humano es no sentirse amado por Dios”, subrayó y añadió: “Dichosos nosotros que hoy podemos renovar en nuestros corazones, como lo han hecho las generaciones de empedradeños que nos precedieron, la fe en Nuestro Señor Hallado”.

Finalmente, monseñor Stanovnik destacó la “bondad y el amor que habitan en los corazones de los empedradeños” y pidió que la presencia amorosa de Jesús “ablande las durezas que nos enfrentan, y nos conceda el don de su paz, para que nos entreguemos con renovadas fuerzas a trabajar por una cultura del encuentro y de la amistad”.+

Mons. Stanovnik a los empedradeños: No pueden desconocer ni negar su clara matriz cristiana

Mons. Stanovnik a los empedradeños: No pueden desconocer ni negar su clara matriz cristiana