Hoy nos acordamos de los misioneros, de los que se han puesto en camino con el afán de predicar a Cristo. Afortunadamente en la Diócesis de Cartagena se vive con mucha responsabilidad la llamada a la misión, son muchas religiosas, religiosos, sacerdotes y familias los que han ofrecido sus vidas a esta tarea tan importante.
También, el trabajo en la Delegación Episcopal de Misiones es un índice de los desvelos por todos los misioneros murcianos en todo el mundo, ¿cómo olvidarlos? Os ruego que no dejéis de encomendarles a Dios, para que les siga fortaleciendo y no decaigan en su labor. Pensad que son hombres y mujeres de carne y hueso, que han dejado muchas cosas detrás, que han hecho una opción preferencial por el Evangelio y están gastando la vida y son felices, muy felices en esta entrega diaria.
Este domingo celebramos el DOMUND y ya sabéis lo que supone, pero os lo recuerdo con las palabras del Papa Benedicto XVI, “que la Jornada Misionera Mundial sea ocasión propicia para comprender cada vez mejor que el testimonio del amor, alma de la misión, concierne a todos. Servir al Evangelio no puede considerarse como una aventura solitaria, sino el empeño que cada comunidad comparte… La misión, si no es orientada por la caridad, es decir, si no nace de un profundo acto de amor divino, corre el riesgo de reducirse a una mera actividad filantrópica y social… Toda comunidad cristiana está llamada, pues, a dar a conocer a Dios que es Amor”. Nadie debe quedarse al margen, debemos colaborar todos, cada uno como sepa y pueda, pero toda la comunidad, para que Cristo sea cada vez más conocido y amado.
Ved ahora cómo vais a ayudar a las misiones, pero no olvidéis de rezar a Dios por los misioneros, tampoco os olvidéis de colaborar económicamente, aunque estemos pasando por una situación económica mala. Dios bendiga vuestras manos abiertas
