Los salesianos comprometidos en la reconstrucción de Filipinas

En Filipinas, después del tifón Haiyan, los salesianos pusieron en marcha diferentes proyectos para su reconstrucción. Se trata de gestos concretos a favor de la población Filipina: la ONG Don Bosco Mondo y la Procura Misionera de Bonn (Alemania) desarrollaron un proyecto que beneficiará a 2.600 familias, alrededor de 11.800 personas, según informan los salesianos.

En su primera fase, en Candahug, una aldea en la isla de Leyte, se ayudará a 360 familias reconstruyendo sus casas –además de una escuela, un centro social y una capilla– que fueron completamente destruidas durante el paso del tifón; después se ayudará en la reconstrucción de las viviendas de 2.000 familias de la provincia de Samar oriental, Aklan y Cebú septentrional.

Los destinatarios de este proyecto son familias que estaban en un estado de mucha pobreza ya antes del desastre. Sus casas no podían resistir el paso del tifón y fueron destruidas completa o gravemente dañadas.

Haciendo referencia al plan “Hyogo” y a la acción “Estratégica Internacional para la Reducción de los desastres” de las Naciones Unidas –que es el marco de referencia mundial en el ámbito de la gestión del riesgo de desastres– los salesianos trabajaron bajo el modelo de reconstrucción de aldea: “adoptar y reconstruir una comunidad”, es decir trabajar por la reconstrucción sostenible de las estructuras, junto con la población del lugar.

En Candahug los salesianos y el personal de Don Bosco Mondo se comprometieron a adquirir los materiales de construcción y financiar el transporte, mientras que la gente de la aldea tendrá la responsabilidad de contribuir para sostener y garantizar la presencia de los supervisores y los técnicos especialistas.

Las pequeñas viviendas tienen aproximadamente 25 metros cuadrados de espacio, con un baño adyacente. El espacio del comedor y otras dependencias están realizados con una variedad de materiales naturales y cemento. El baño, en cambio, construido completamente en cemento, podrá ser utilizado como refugio durante otros desastres que pudieran ocurrir; mientras que para futuras inundaciones contará con un sólido techo.

También en la provincia de Samar oriental, Aklan y Cebú septentrional, las familias serán involucradas en los trabajos de reconstrucción de sus propiedades y será construida una superficie pavimentada para asegurar la debida protección en caso de tempestad.

Más allá de los dos tipos de intervención en las viviendas (reconstrucción o reparación) está prevista una tercera fase de habilitación de 10 escuelas elementales en las 4 áreas atendidas por el proyecto, tanto para reiniciar la formación escolar de los menores, como para sostenerlos en la superación de las experiencias traumáticas vividas. Los trabajos se iniciarán en enero de 2014 y finalizarán durante el año.

Estas ayudas y programas se suman a las diversas ayudas que, desde el momento de producirse el desastre, comenzaron a llegar de todo el mundo salesiano a través de la red salesiana de solidaridad.+