Durante las tres últimas semanas de septiembre de 2012, Oviedo, Gijón y Avilés, acogen la conocida Semana de la Catequesis, una serie de encuentros anuales que tratan de suministrar a los catequistas asturianos nociones y técnicas que les permitan ejercitar su importante servicio dentro de la Iglesia de una manera acorde a los tiempos.
El colectivo de catequistas asturianos, unos 2.000, preferentemente mujeres, advierte de un tiempo a esta parte cómo las familias se desentienden de la educación de la fe de sus hijos, delegándola en la parroquia o en los catequistas en el mejor de los casos. Un hándicap de grueso calibre, porque uno de los secretos de la trasmisión de la fe reside en el ámbito familiar de los niños y en su ligazón con la parroquia.
Pese a las dificultades los catequistas no se amilanan, porque saben bien del sentido espiritual de los niños y de su capacidad para poder comprender el misterio de la fe, tantas veces desvelado a los pequeños, a los que se “hacen como niños”.