Es evidente que la diócesis de Málaga tiene un problema

El 10 de octubre del 2008 Benedicto XVI nombró a Mons. Jesús Catalá, hasta entonces obispo de Alcalá de Henares, como obispo de la diócesis de Málaga. Tomó posesión de la misma el 13 de diciembre de ese mismo año. Lleva por tanto, 5 años largos al frente de la iglesia malagueña. Pero ha tenido que ser en este 2014 cuando se ha encontrado de frente con dos hechos insólitos. En el pregón cofrade de la Juventud se hizo una encendida defensa de las uniones homosexuales. Ciertamente hubo una respuesta más o menos adecuada por parte de la Cofradía responsable. Pero se ve que algunos no aprendieron la lección y ayer mismo, en el pregón de las Glorias, un político retirado de Izquierda Unida volvió a hacer exactamente lo mismo.

Se da además la circunstancia de que la diócesis andaluza ya manifestó su desacuerdo con la elección de pregonero. Lo hizo en noviembre pasado. Es decir, ha habido tiempo más que de sobra para evitar lo que ha ocurrido. Parece claro que las Cofradías de Gloria en Málaga tienen en cuenta el parecer de su obispo lo mismo que tengo yo en cuenta el parecer del imán de la mezquita de la M-30 en Madrid. Por otra parte, no hay que ser muy avezado para dar por hecho que la postura de quien ha sido portavoz de Izquierda Unida en el ayuntamiento de Málaga no comparte la doctrina de la Iglesia en temas fundamentales como el aborto y la familia. Es decir, quienes invitaron a D. Pedro Moreno Brenes a dar el pregón, sabían muy bien lo que hacían y lo que buscaban con esa elección. Y estoy convencido de que daban por hecho que al obispado no le haría gracia alguna y que, a pesar de ello, no cambiarían de pregonero. Conclusión: se trata de una chulería, una provocación y una falta absoluta de respeto de las Cofradías -al menos de sus dirigentes- hacia la persona del vicario de Cristo en Málaga. Lo que es lo mismo que decir a toda la Iglesia, porque como decía San Ignacio de Antioquía a principios del siglo II, allá donde está el Obispo está la Iglesia.

A diferencia de lo que ocurrió durante el pregón de la Juventud, donde el delegado diocesano de cofradías no estuvo presente, en el pregón de ayer sí se contó con la asistencia de dicho delegado, el P. Antonio Jesús Coronado. El sacerdote, que seguramente habrá hecho todo lo que está en su mano para evitar el espectáculo que finalmente se dio, tuvo el gesto de salir del lugar nada más finalizar la charla de Moreno Brenes, sin quedarse a saludar a nadie. Es una muestra visible de lo que la diócesis malagueña opinaba de lo que acababa de ocurrir. Muy bien hecho. El resto, parece ser, aplaudieron (sic)

Casualidades de la vida, ayer tuve la “dicha” de mantener un intercambio de mensajes por Twitter con el pregonero. He aquí la captura de imagen de la mini-charla:

Como ven ustedes, don Pedro Moreno tenía clarísimo lo que iba a decir. Sabía que sus palabras serían contrarias al Magisterio de la Iglesia y “confiaba” en que el Santo Oficio no apareciera. Para él, la defensa de la doctrina católica es propia del integrismo excluyente.

Ahora yo le pregunto a don Pedro y a cualquiera que me quiera contestar: ¿Se imagina usted lo que habría pasado si un responsable de Izquierda Unida en Málaga ofreciera el mitin de fin de campaña electoral a una persona que defendiera el derecho a la vida y el matrimonio según la ley natural? ¿Cuánto tardaría el resto de la coalición de izquierdas en reaccionar para impedir tal cosa? ¿Cuánto tardaría en abrir un expediente a dicho responsable si finalmente se produjera dicho mitin en esa condiciones?

Hay principios elementales que no se pueden orillar. Se trata de la coherencia y la decencia. Y no es coherente ni decente hacer lo que han hecho la Cofradías de gloria malagueñas. ¿Creen ustedes que deberían ser intervenidas canónicamente si tal cosa es posible? Don Pedro no ha engañado a nadie. Todos sabían muy bien lo que piensa y lo que podía decir. Ciertamente podría haber sido lo suficientemente sensible como para no poner a sus anfitriones a los pies de los caballos, pero créanme ustedes que si el pastor de una iglesia evangélica se volviera loco y me solicitara que les diera a sus fieles una charla sobre la gracia de Dios, aprovecharía la ocasión para predicar la fe católica. Es normal que el ex-portavoz de IU en Málaga haya “predicado” su visión política y personal sobre las relaciones homosexuales. Y de la misma manera que ese pastor protestantes dejaría de ser pastor, no tendría nada de particular que se pidiera a los responsables de las Cofradías de Gloria malagueñas que dejaran sus cargos.

Bastante tenemos con que la fe católica sea puesta en solfa fuera de la Iglesia como para que nos permitamos el lujo de que la pisoteen dentro de la misma. Son muchos los fieles que están cansados de que eso ocurra. Y, sobre todo, de que no haya consecuencias.

Luis Fernando Pérez Bustamante

PD: Comunicado de la diócesis de Málaga:

Ante las manifestaciones vertidas por D. Pedro Moreno Brenes durante el pregón que pronunció a la Agrupación de Hermandades de las Glorias de Málaga en la tarde de ayer, este Obispado quiere puntualizar:
1. Su rechazo total a todas y cada una de las afirmaciones expresadas por D. Pedro Moreno Brenes que contradicen de plano la doctrina y el magisterio de la Iglesia Católica.
2. Lamentamos que en un pregón que debe exaltar, en este caso, las Glorias de Málaga, se expresen opiniones personales que contradicen la moral de la Iglesia Católica.
3. Por último, exhortamos a todos los fieles católicos y cofrades de Málaga a una profunda reflexión ante estos hechos tan lamentables que, sin duda, conducen a una confusión entre los fieles, escándalo para otros muchos y dolor para todos.

Como primera medida, no está nada mal. Esperemos que haya más consecuencias para que esto no se vuelva a repetir.