CAMINEO.INFO.- Madrid/ESPAÑA.- Escuelas Católicas (FERE-CECA y EyG) celebra desde el pasado jueves y hasta el sábado su XI Congreso en el Hotel Auditorium de Madrid bajo el lema “El liderazgo educativo, motor del cambio”, con el objetivo de transmitir lo importante que es preparar a niños, adolescentes y jóvenes para el futuro. Este encuentro quiere difundir, a través de todas sus ponencias y mesas redondas, que la mejor salida a la crisis que estamos sufriendo pasa por una mayor inversión en educación.
El cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, participó el viernes por la tarde en este congreso y quiso dejar claro que el Estado ha de responder a un ordenamiento moral y ético y servir a una educación integral del hombre y de los ciudadanos.
Inmaculada Tuset fue la encargada de presentar al cardenal y además de agradecer su presencia, recordó su impulso en la JMJ y su importante presencia y apoyo a la escuela católica en estos momentos de cambio y de opción por el liderazgo.
El cardenal Rouco expresó su alegría por compartir los minutos finales de la XI Asamblea Nacional de Fere e hizo alusión a la JMJ Madrid 2011 y el modo tan intenso lleno de gozo y alegría con la que las escuelas católicas vivieron la jornada junto al Santo Padre.
El arzobispo de Madrid hizo alusión al momento histórico que vivimos y a la importancia de defender los principios básicos que deben inspirar a las escuelas católicas.
Así, recordó el viaje del Papa a Alemania en el que se habló del derecho a la educación y del desarrollo de este derecho. “Es necesario encontrar corazones que sepan escuchar la palabra del Señor en un momento histórico y en una sociedad en la que el hombre ha adquirido una cuota de poder como nunca se había producido en la historia de la humanidad… El hombre piensa que se puede hacer y aniquilar a sí mismo, pero el hombre tiene que preguntarse por los fundamentos éticos y morales que permiten que el orden sea un orden justo”.
El cardenal Rouco recordó que Benedicto XVI explicó durante ese viaje la necesidad que existe de que en este momento de la historia de Europa y del mundo acudamos a la fuente de la naturaleza y de la razón. “A la hora de hablar de las fuentes de la inspiración del derecho en el siglo XXI es necesario renovar la pregunta de los fundamentos del derecho y de la justicia y es necesario conocer la fuente de la revelación de la fe y ver que es lo fundamental de la vida del hombre”.
La importancia de la dignidad del ser humano y de reconocer sus derechos
El arzobispo de Madrid también explicó que la educación católica en España es responsabilidad de los padres de familia, pero también de los educadores. “Debemos apostar y esforzarnos para que todo niño y joven tenga derecho a una educación en libertad, porque el derecho a la educación es un derecho universal”. “El Estado tiene que garantizar el derecho a la educación y a la libertad de esa educación”, recordó.
También aprovechó para subrayar que es oportuno y necesario recordar esta doctrina, ya que en España, en el actual ordenamiento jurídico, hay apertura para la comprensión de este derecho, concretamente en el artículo 27 de la Constitución. “Es necesario ofrecer y garantizar una educación integral que comprenda al hombre en su totalidad”.
Finalmente concluyó recalcando que los padres son los principales responsables de ofrecer una educación moral y religiosa a sus hijo y esto no quiere decir, afirmó, que la dimensión de la fe y de la moral no debe ser una cuestión indiferente para el Estado. “El Estado ha de responder y atender a un ordenamiento moral y ético y servir a una educación integral del hombre y de los ciudadanos”.
“La educación religiosa en la escuela publica es cosa de héroes, por eso es necesario la fundación de centros con idearios propios para que el derecho a recibir una educación católica se pueda desarrollar plenamente”. “Necesitamos la ayuda de la oración para lograr que la educación integral en libertad se corresponda con el bien común”.
