San José/COSTA RICA.- El presidente de la Conferencia Episcopal de Costa Rica (CECR) y Arzobispo de San José, Mons. Hugo Barrantes Ureña, afirmó que declarar el 25 de marzo como el Día del No Nacido sería un desafío muy valioso frente a la cultura de muerte.
El también Arzobispo de San José hizo estas declaraciones a ACI Prensa en el marco de la presentación del proyecto de ley de la diputada Rita Chaves Casanova, del Partido Accesibilidad sin Exclusión (PASE), para declarar el 25 de marzo como el "Día de la Vida Antes de Nacer en Costa Rica".
"Su propuesta es un gesto muy valioso e importante ahora que estamos inmersos en la llamada cultura de la muerte con leyes que van contra la vida", señaló.
El proyecto, que será presentado el próximo 21 de marzo en el salón de expresidentes de la Asamblea Legislativa, busca proteger la vida del concebido y ser respuesta a las diversas acciones que atentan contra la vida del niño por nacer y promueven el aborto en Costa Rica.
El Prelado denunció además que hay otros proyectos en la Asamblea Legislativa "haciendo fila para ser aprobados, uno para legalizar la fecundación in vitro, otro a favor del reconocimiento de derechos para matrimonios del mismo sexo y algunos otros de salud reproductiva".
Sobre el caso de la fecundación in vitro que promueve la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para imponerla en Costa Rica y que amenaza la defensa del no nacido en América Latina, el Prelado dijo a ACI Prensa que el tribunal no puede pasar por encima de la constitución del país, "que reconoce que el derecho a la vida humana es inviolable".
"Ahora lo que argumentan es que puede darse la fecundación in vitro con un solo embrión, lo cual es discutible por los científicos, porque se sabe que siempre se necesita experimentar con varios (embriones), de los cuales sólo se escogen los mejores", dijo.
Mons. Barrantes reafirmó a que la Iglesia siempre defenderá que "desde el momento de la concepción tenemos un ser humano", por ello expresó su apoyo al proyecto de la diputada Chaves, quien "abiertamente defiende la dignidad de la vida del no nacido".
Finalmente, resaltó que "normalmente el derecho a la vida del nacido es reconocido, pero lamentó que al no nacido no se le considere un ser humano".
Ante esa situación, dijo, los obispos siempre se han pronunciado ante las amenazas contra la vida y explicó que "el pueblo está muy informado sobre el criterio de la Iglesia, que siempre defenderá el derecho a la vida desde la concepción en Costa Rica".
