La juventud y la educacion

El otro día uno de los creadores de ésta página web en donde puedo ser una voz que hable al exterior, me pidió que escribiera sobre el título que da lugar a este artículo, por lo que intentaré desde la óptica de la Iglesia Católica y su Magisterio tratar un tema que a todos nos importa, pues los jóvenes de hoy serán los adultos del mañana, aquellos que tomarán decisiones que nos afectarán a todos.

Hay un horizonte en este articulo que no podemos dejar de lado, y es que el progreso es conocimiento, y este conocimiento es poder. Para nuestra sociedad el concepto de progreso es una combinación entre conocimiento y poder, pero falta una perspectiva esencial: el aspecto del bien, es decir el aspecto ético se ha eliminado o ah quedado oculto por el afán de avanzar en el progreso, culpa de ello entre otras cosas, es el concepto fundamental de la Edad Moderna: la libertad, que se entiende como libertad para poder hacerlo todo, sin valorar si una acción es ética o moral, porque lo esencial es el progreso.

A partir de este modo de pensar surge la reivindicación de que la ciencia es indivisible, es decir, lo que se puede hacer, hay que hacerlo, pues todo lo demás iría contra la norma fundamental del progreso que es la libertad.

Y la educación de los niños y jóvenes forma parte esencial de ése progreso que se quiere alcanzar, y que podría ser positivo si el aspecto ético o moral se tuviera en cuenta como una parte integrante y esencial de dicho progreso; pero la realidad es que este aspecto ha sido eliminado en aras de un objetivo profundamente perverso que es el poder y el controlar las mentes de aquellos jóvenes que en un futuro serán adultos, y en donde la capacidad de pensar por uno mismo queda eliminada a lo que la “sociedad” o conjunto de individuos piensa, es decir, hay una manipulación de la educación con el objetivo de lograr un determinado tipo de adulto del futuro sin ética o moral, donde la primacía de todo sea la libertad, esto es, en realidad “tu crees que piensas por ti, pero en realidad piensas, lo que otros te han ido inculcando en tu vida educativa”.

¿Y cómo podemos ver en nuestra realidad actual dicha manipulación?. Las vemos con la cantidad de manifestaciones de los estudiantes en contra de los recortes económicos del actual gobierno de centro-derecha, resulta paradójico que muchos de los manifestantes sobrepasen la edad de los treinta, y que sean siempre los movimientos de izquierda los que promuevan éstas manifestaciones.

Esta realidad solo es un dato real del sentir de una sociedad estudiantil verdaderamente manipulada por las distintas políticas gubernamentales de los gobiernos estatales y autonómicos, por lo que no es de extrañar tales manifestaciones, que son parte de la estrategia de adoctrinamiento desde los inicios de la educación del niño avanzando hacia el joven, y finalmente al adulto.

En la medida en que avancemos en el aspecto ético y moral de una política educativa basada en el respeto y las creencias de la persona, eliminando el adoctrinamiento que supone un menoscabo de una acción futura en libertad, podremos decir que la juventud tendrá posibilidades de pensar por si misma y de ejercer su libertad como adultos.