CAMINEO.INFO.- “Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos
y el servidor de todos”. “El que acoge un niño como éste … me acoge a mí”.
Es porque Jesús nos dice cosas como éstas que nos ha
seducido a todos y lleva dos mil años seduciendo a todo aquel que lo escucha.
Qué suerte poder escuchar palabras que son luz. Palabras que iluminan el
sentido de la vida. Tantos y tantas que no saben que les hará felices. Y se
dedican a hacerse fotos, a comprar o a utilizar el cuerpo de los demás. Qué
suerte tenemos...!
Dios nos crea con su palabra, hablando, el hombre se
construye escuchando. Escuchando palabras como éstas. Shema Israel = escucha
Israel. Palabras así nos recuerdan la importancia de escuchar.
Enseñanzas como éstas, que entroncan con lo más profundo
de nuestros corazones, nos hacen ver que sí, que estamos en el lugar correcto,
que vale la pena estar aquí un sábado/domingo más para escuchar una palabra de
vida.
Comentemos un poco cada afirmación. “Quien quiera ser
el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos”. El primero no es el que sabe más
teología, o el que reza más, ni el que tiene más dinero, ni más propiedades, ni
un mejor trabajo. El primero es el que sirve. Es revolucionario.
Esto ha de cambiar nuestra manera de ver el mundo, de
vernos a nosotros mismos.
El mundo está desorientado...
No sabe por dónde se encuentra el sentido de la vida...
Hay mucha gente perdida, triste, sufriendo, por no
saberlo...
Ser servidor es tan contracultural que nos miran como si
fuéramos unos pringados...
Si estamos sirviendo, hemos de tener autoestima, estamos
desarrollando el proyecto que Jesús nos propone...
El servicio ha de ser acompañado de la alegría, del buen
rollo. Un servidor malhumorado, no es la idea que Jesús nos propone.
El servidor que sea humilde, no para recibir
felicitaciones, o medallas, o conseguir que hablen bien... ¡No!
Que la motivación del servicio sea buscar el bien del
otro...
Resumiendo: ¡servir con alegría, con humildad, motivados,
siendo luz en medio del mundo!
Os propongo que entremos en el corazón de Jesús cuando
dice estas cosas... ¿qué os parece que
encontramos? Jesús dice “ ... “ .. ¿qué hay en su corazón? Yo encuentro el gozo
de servir, la alegría de servir, la felicidad en el servicio, en el darse a los
demás. Y por esto enseña lo que enseña. Jesús no explica una teoría, expone una
vivencia suya.
Paradoja del evangelio: En el servicio parece que pierdas
la vida y en verdad la reencuentras.
Vamos a la otra frase:
“El que acoge a un niño como éste … me
acoge a mí”. Uuuuuaaaaauuu. Unas palabras que han sido el motor de
la caridad por los cristianos desde hace dos mil años.
Ver a Cristo en el otro, mirarlo como mirarías a Cristo,
tratarlo como tratarías a Cristo, ayudarlo como ayudarías a Cristo, es la
fuerza más poderosa para un cristiano.
Ya no te fijas si es cristiano o musulmán, ni si es
blanco o negro, ni si es simpático o antipático, ni en si hule bien o mal. No
te guías por la sensibilidad sino por la fe. Ves a Cristo y esto lo cambia
todo.
Libro de Santa Teresa de Calcuta foto del lugar, como una
camilla, donde ponían a la gente que venía de fuera, para limpiarlo y hacerle
las primeras curas. Y allí había un rótulo que decía: “Corpus Christi”.
Hemos de hacer camino en el amor a los pobres. Aquí se
unen las dos afirmaciones, el servicio a los demás, especialmente al pobre, y servir como si sirviéramos al mismo Cristo.
Al escuchar estas palabras hemos de dejarnos levantar,
resucitar por ellas. Estamos encerrados en
nuestra zona cómoda, en nuestros egoísmo, que estas palabras nos
resuciten.
Cada uno examine lo que tiene, rece, y vea cómo puede
ayudar más a los necesitados:
. pisos vacíos, o con habitaciones vacías... Tenemos unos
problemas de vivienda espectaculares, abrir espacios...
. joyas que no hacemos servir para nada, o que nada
nos aportan: recuerdo que en Ripollet,
no sé que prediqué, pero unos días después una mujer mayor me trajo sus joyas para venderlas y dar el importe a
Cáritas.
. dar tiempo para movilizarnos contra injusticias. Desde
el principio que salieron las P.A.H. (Plataformas de Afectados por la
hipoteca), que yo pensaba: “esto lo tendríamos que hacer los cristianos”. Forma
parte de nuestra tarea de seguidores de
Jesús denunciar la injusticia. Viernes mañana estuvieron cuatro horas
presionando al alcalde por una familia que se había quedado en la calle.
“El que acoge a un niño como éste … me acoge a mí”.
La podemos poner también en negativo: “El que no acoge a un niño como éste … no
me acoge a mí”. Estamos rechazando a Dios. ¡Rechazando a Dios!
¡¡Recémoslo!!
¡Servir, como si sirviéramos al mismo Cristo!