Valencia/ESPAÑA.- Más de un millar de niños y jóvenes de entre 10 y 18 años disfrutan, durante los meses de julio y agosto, de los campamentos o escuelas de verano organizados por la Inspectoría Salesiana de Valencia desde centros, aso-ciaciones juveniles, grupos scouts, casas de acogida de menores y centros de día.
En la actualidad, 214 niños, con edades comprendidas entre los 8 y 18 años de edad participan, junto a 45 animadores y 12 encargados de cocina, en el campamento orga-nizado por Centro Juvenil Amics de Salesianos San Antonio Abad en la localidad de El Espinar, en Segovia, donde permanecerán hasta el próximo 31 de julio.
Por su parte, el Centro Juvenil Entre Amics de Salesianos San Juan Bosco viajará del 17 al 30 de julio a Huesca, donde tendrá lugar su campamento titulado "La vuelta al mundo" y en el que participan 203 niños junto a 40 animadores y salesianos.
Igualmente, la Casa Don Bosco de Valencia tendrá una convivencia del 20 al 25 de agosto en Altea, titulada "En familia" y en la que está prevista la participación de 12 ni-ños y cuatro educadores.
Asimismo, la Casa y el Centro de Día Don Bosco pertenecientes a Salesianos San Antonio Abad, organizó su acampada a finales del mes de junio, en Albaida, en el que participaron 30 jóvenes y 8 educadores.
Además, también se han organizado campamentos y actividades de verano en las 15 obras salesianas que forman la Inspectoría, distribuidas a lo largo de la Comunidad Valencia, Albacete, Zaragoza y Murcia.
Los campamentos, “marcan el punto final del curso en cada centro, asociación o casa de acogida”, según ha señalado el delegado inspectorial de pastoral juvenil, Fernando Miranda, quien ha añadido que “después de muchos meses de actividades, a través de las cuales se desarrolla el proyecto educativo del centro, el campamento de verano es como el lazo que envuelve un estupendo regalo”.
Los objetivos de cada actividad son, entre otros, “educar a niños y jóvenes como educó Don Bosco en el oratorio”, “vivir el ambiente de familia, de alegría y acogida”, así como “acercarnos un poco más a la naturaleza y hacer de ella nuestra casa duran-te diez o quince días”, ha añadido.
Igualmente, Fernando Miranda ha señalado la importancia de los animadores, que tie-nen “un papel destacado, ya que todos ellos son voluntarios, con la única recompensa de saberse satisfechos por el trabajo bien hecho”. Asimismo, ha destacado la labor de “las personas que colaboran en estas actividades de verano como voluntarios en tare-as de intendencia, cocina e infraestructura”.
