XVI DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Es fácil que los mensajes de pasarlo bien acaben ahogando lo que Jesús nos ha dicho... Esperemos que no pase... No podemos hacer vacaciones de la fe, del seguimiento de Jesús...

Lo deseable es que en medio de la diversión, de las salidas, de los viajes, tengamos siempre tiempo para él, tiempo para escucharlo. Y permitidme que dé mi testimonio personal. He estado dos semanas de campamentos, primero, cerca de Gerona y después cerca de Madrid. La hora de oración matinal nunca la pierdo, esté donde esté, esté más o menos cansado, haya dormido más o menos. Es la hora que da sentido a mi día. Miro la primera actividad que hay, resto una hora para rezar, resto veinte minutos de ducha y pongo la hora del despertador. Si toca las seis de la mañana, toca las seis, si toca las cinco y media, toca las cinco y media...

Hemos de descubrir que Jesús es la parte mejor, no hay nada comparable a tener a Jesús en nuestra vida. Dice Jesús “María ha escogido la parte mejor”. La mejor es la mejor. No es un comparativo: “una de las buenas”, sino es un superlativo: “la mejor”.

Nos hace falta descubrir esta “parte mejor”, porque nos jugamos el ser o no ser de nuestra fe. Hasta que no la descubramos, nuestra fe tendrá poca profundidad.

Hoy Jesús nos dice a nosotros: “José, José, Isabel, Isabel, andas inquieta y nerviosa con tantas cosas; sólo una es necesaria”. A cada uno de nosotros nos lo dice.

¿Es para nosotros escuchar al Señor, la única cosa necesaria? ¿Es para nosotros estar a los pies del Señor la parte mejor de nuestra vida? Nos queda camino para hacer... pidámoslo, con intensidad: “Señor que seas  mi parte mejor, Señor que esté a gusto a tus pies, escuchándote...

Fijaros qué tres frases hoy hemos escuchado: Segunda lectura: “El proposito de Dios es este: que Cristo esté en vosoltros.”. Evangelio: sólo una es necesaria”, “María ha escogido la parte mejor”. Está hablando de estar a los pies de Jesús, escucharlo.

No hay nada comparable a Cristo, a estar con Cristo. Dice San Antonio María Claret: “Enamórense de Jesucristo y lo tendrán todo”. Todo…

El lema de los campamentos de pequeños era “Caminemos con Jesús”. Por la mañana, hacíamos un rato de oración, y lo hacíamos a partir de los “yo soy de Jesús”.

- “Yo soy la luz del mundo…

- “El Camino, la Verdad y la Vida”

- “El buen pastor que da la vida por sus ovejas”

- “La resurrección y la vida”

- “Yo soy el pan que da la vida”

- “Yo soy la vid y vosotros los sarmientos”

Y yo les decía… si Jesús es todo esto.

‘’¡¡Cómo no caminar con Jesús!!”

Traslado razonamiento a lo que estábamos diciendo: Si Jesús es…la luz, el camino … ¡¡Cómo no estar con él!!

¡¡Cómo  no escucharlo!!

¡¡Cómo no pasar largos ratos de encuentro con él!! ¡¡¡Cómo no!!!