Las misiones urbanas se llevan a cabo en el entorno de San Pedro y cerca de la parroquia San Salvatore in Lauro, donde se encuentran dos reliquias de Juan XXIII y con Juan Pablo II, a la que pueden acercarse los peregrinos para recibir el sacramento de la reconciliación o a recogerse durante unos minutos en adoración y oración en medio de la vorágine que es Roma estos días.
Fotografiarse con los dos nuevos santos, Juan XXIII y con Juan Pablo II, es una de las iniciativas que han emprendido estos jóvenes legionarios. Camina por los alrededores de San Pedro con un gran marco que contiene las siluetas de los dos papas, e invitan a los peregrinos a fotografiarse con ellos.
Otra las acciones emprendidas en estas misiones por las calles se llama "Desafía al Sacerdote". Está instalada a la puerta de la parroquia San Salvatore in Laudo, y consiste aceptar el reto de competir al mini fútbol en una pequeña cancha contra dos de los jóvenes legionarios, partidillo tras el que se los jugadores se adentran en la iglesia para hacer juntos una oración.
La tercera iniciativa es un viacrucis peculiar. Los seminaristas recorren la ciudad cargando unas cruces, e invitando a los peregrinos a dejar en ellas sus intenciones, que los legionarios de Cristo se comprometen a encomendar.
Por último, un grupo de legionarios ha organizado una orquesta que se traslada de plaza en plaza para ofrecer piezas musicales, invitando a cantar y a bailar, y evangelizando a través de la alegría de la música.
Todos ellos, además, animan a los peregrinos a preparar el corazón para las canonizaciones, a dedicar un tiempo a la oración, y a recibir los sacramentos de la reconciliación y la Eucaristía.